5 de junio de 2017

Sentimientos de tu hermana 10 años después

Elena Martín Gea
Quién iba a decirme a mí que un día como hoy, hace 10 años, mi vida daría un giro de 360º. Quién iba a decirles a mis padres que su primera gran ilusión no duraría más de 13 años. Quién iba a decirnos que deberíamos aprender a vivir con una injusta pérdida y que deberíamos arrastrar su imagen como un recuerdo, y ya no más como una realidad. Aprendí que las casualidades existen de la manera más triste y atroz.
Que unos padres sobrevivan a sus hijos es la manera más cruel que tiene la naturaleza de ponerles a prueba. Que una niña pierda de vista las huellas que andaba siguiendo la deja sin un rumbo seguro. Cuántas cosas hemos perdido por perderte a ti. Cuantas discusiones y guantazos por aguantar, cuantos abrazos y consejos por recibir. Dejé de abrir regalos con ilusión. Ya no jugaríamos en el jardín o nos tiraríamos bolas de nieve, ya no vendrías cada viernes con un regaliz rosa para mí, ya no me harías rabiar ni veríamos películas juntos o nos esconderíamos para comernos un bote entero de Nocilla a cucharadas. Ver cómo conseguías aprobar y graduarte, y que tú me vieras a mí hacerlo. Verte disfrutar de aquello que más te gustase. Tal vez verte triunfar como dibujante, paleontólogo o triatleta. ¿Director de cine, quizás? Apoyarte cuando todo se desmoronase también, y yo tener tu apoyo. Qué de cosas podrían haber pasado en 10 años… Y no puedo evitar pensar en cómo sería mi vida si te hubiera tomado 15 segundos más el agarrar tu bici y salir de casa.
Y entonces agarro tu habitación y tu cama y la hago mía. Sí mamá, sí papá, mía. No quiero volver a dormir en mi habitación. Y durante años me duermo con tu olor en la almohada, hasta que desaparece. No. No quiero que desaparezca. Elena joder, no te olvides de su olor. Espera, ¿y su voz? Mierda. No, por favor…
Suelo pensar que me gustaría viajar a una dimensión paralela donde esos segundos de más hubieran tenido lugar, sólo para ver cómo sería nuestra vida, aunque no para quedarme. Porque, no sé si de manera egoísta, pienso que la persona que sería en ese mundo no sería ni de lejos la que soy ahora. Que te tendríamos, pero entonces no valoraríamos lo que podríamos no tener como otras tantas personas hacen. Que este tipo de hostias que da la vida te hace tener la muerte mucho más presente. Te hace entender el valor del tiempo y lo rápido que puede terminar para cada uno. Me ha hecho querer y apreciar lo que me ha conseguido hacer feliz en algún momento de mi vida. No sé, es como que no solo aprendí que las casualidades existen, sino que de estas también se aprende.
No estoy segura de si debo, pero al menos trato de verle una parte positiva a esta mierda, tanto para mí como persona, como para mi familia.
Hace 10 años y dos días estábamos todos juntos.
Hoy continuamos estándolo.

1 de junio de 2017

10 años

1 de junio. Hoy perdí a Alex. 10 años. Más de 6 años fueron el horror en vida, la tristeza implantada en mi alma,corazón y vida -como dice la canción-Los siguientes empezaron a ser soportables, si, un poco más , lo confirmo. Este tiempo sin él ha sido un mal sueño hecho realidad que dejará por siempre el olor de la primavera como los días más tristes del año. Te quiero Alex..dónde estés..